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SP/DOCT/106607

Artículo Monográfico. Diciembre 2020

Urgencias relacionadas con manifestaciones descritas en la alienación parental y su asociación con divorcios conflictivos: el papel del pediatra en medio de la incertidumbre

Purificación Calero Navarro. María Teresa Jiménez Busselo. Juan Aragó Domingo. Doctores en Medicina y especialistas en Pediatría. Miembros del equipo de Urgencias del Servicio de Pediatría del Hospital Universitario y Politécnico La Fe de Valencia. María Irles Dolz. Noelia González Montes. Médicos internos residentes del Servicio de Pediatría del Hospital Universitario y Politécnico La Fe de Valencia
RESUMEN

Ante la realidad social del incremento de rupturas conyugales, el pediatra se enfrenta a la atención de problemas en estos contextos que afectan a los niños y adolescentes y que debe saber abordar porque es el responsable de garantizar su salud integral –física y mental– desde una perspectiva tanto clínica como social y de salud pública. Nuestra actuación se debe basar en criterios científicos y técnicos siempre bajo el prisma de la bioética, buscando el interés superior del menor y protegiéndolo por su especial vulnerabilidad desde la prudencia y responsabilidad profesional. Para ello el pediatra, por un lado, debe conocer los procesos que se generan en las rupturas conyugales a nivel adaptativo, así como los que constituyen factores de riesgo psicosocial y, por otro lado, debe optimizar sus competencias para saber cómo ha de actuar, qué puede o no diagnosticar y qué debe hacer para garantizar la salud integral y protección de sus pacientes. A pesar de todo esto, hemos de reconocer un déficit de formación sobre esta materia en nuestro sistema formativo de especialidad por la clara hipertrofia de la medicina clínica en detrimento de la pediatría psicosocial, aunque es evidente la inquietud e interés que despierta el tema entre los profesionales debido al incremento de las consultas y problemas infantiles relacionados con las rupturas conyugales de sus progenitores.

In view of the social reality of the increase in marital break-ups, the paediatrician is faced with problems in these contexts that affect children and adolescents and that he or she must know how to deal with because he or she is responsible for guaranteeing their comprehensive health -physical and mental- from a clinical, social and public health perspective. Our actions must be based on scientific and technical criteria always under the prism of bioethics, seeking the best interest of the child and protecting him/her because of his/her special vulnerability from the point of view of prudence and professional responsibility. To this end, the paediatrician, on the one hand, must know the processes generated in marital break-ups at the adaptive level, as well as those that constitute psychosocial risk factors and, on the other hand, must optimize his or her competencies to know how to act, what he or she can or cannot diagnose and what he or she must do to guarantee the integral health and protection of his or her patients. In spite of all this, we must recognize a deficit in training on this subject in our specialty training system due to the clear hypertrophy of clinical medicine to the detriment of psychosocial pediatrics, although it is clear that the concern and interest that the subject arouses among professionals due to the increase in consultations and child problems related to the marital breakdown of their parents is evident.

PALABRAS CLAVE

Alienación parental, síndrome de alienación parental, maltrato psicológico infantil, niños de divorcio conflictivo

Parental alienation, parental alienation syndrome, child psychological abuse, children of conflicting divorce

I. Introducción
Actualmente, en nuestra sociedad, la ruptura conyugal es una situación vital frecuente que conlleva sufrimiento para toda la familia y distintos niveles de conflicto entre los progenitores que, en la mayoría de los casos, se resuelve con el tiempo. Sin embargo, en el 10-15 % de estas rupturas persiste el intenso conflicto que se cronifica más allá de los dos años caracterizándose por un elevado número de litigios judiciales, altos niveles de ira y desconfianza y dificultades de comunicación sobre los hijos; pudiendo incluir historias de violencia doméstica que se perpetúa/intensifica tras la separación y casos de alienación parental (AP) Nota que culmina con el rechazo de los hijos a relacionarse con un progenitor. Hay conflictos/abusos cuya responsabilidad principal es debida a uno de los progenitores y también casos de responsabilidad compartida lo cual es necesario distinguir por profesionales cualificados porque las intervenciones legales y el abordaje terapéutico son completamente diferentes(1). Está absolutamente demostrado que la exposición de los hijos a este alto conflicto crónico es lo que supone un factor de riesgo psicosocial, es decir, que puede producirles o exacerbarles una